4 Bienaventurado el hombre que puso en Jehová su confianza, Y no mira a los soberbios, ni a los que se desvían tras la mentira.

40 Pacientemente esperé a Jehová, Y se inclinó a mí, y oyó mi clamor. 2 Y me hizo sacar del pozo de la desesperación, del lodo cenagoso; Puso mis pies sobre peña, y enderezó mis pasos. 3 Puso luego en mi boca cántico nuevo, alabanza a nuestro Dios. Verán esto muchos, y temerán, Y confiarán en Jehová.

40 Pacientemente esperé a Jehová, Y se inclinó a mí, y oyó mi clamor. 2 Y me hizo sacar del pozo de la desesperación, del lodo cenagoso; Puso mis pies sobre peña, y enderezó mis pasos. 3 Puso luego en mi boca cántico nuevo, alabanza a nuestro Dios. Verán esto muchos, y temerán, Y confiarán en Jehová.

4 Bienaventurado el hombre que puso en Jehová su confianza, Y no mira a los soberbios, ni a los que se desvían tras la mentira. 5 Has aumentado, oh Jehová Dios mío, tus maravillas;

1 Pacientemente esperé a Jehová, Y se inclinó a mí, y oyó mi clamor. 2 Y me hizo sacar del pozo de la desesperación, del lodo cenagoso; Puso mis pies sobre peña, y enderezó mis pasos. 3 Puso luego en mi boca cántico nuevo, alabanza a nuestro Dios. Verán esto muchos, y temerán, Y confiarán en Jehová.

Cuán bienaventurado es el hombre que ha puesto en el SEÑOR su confianza, Y no se ha vuelto a los soberbios ni a los que caen en falsedad. Bienaventurado el hombre que pone en Jehová su confianza, y no mira a los soberbios, ni a los que se desvían a la mentira.

Encouraging and challenging you to seek intimacy with God every day. Muchas bendiciones se derraman sobre los que confían en el SEÑOR, y no se fían de los altivos ni de los que confían …

El Salmo 40:4 dice: "¡Bienaventurado el hombre que puso en Jehová su confianza y no mira a los soberbios ni a los que se desvían tras la mentira!". Este verso nos enseña la importancia de la confianza que debemos depositar en nuestro Dios y cómo esto se convierte en una bendición para nuestra vida.

Bienaventurado el hombre que puso en Jehová su confianza, Y no mira a los soberbios, ni a los que se desvían tras la mentira. Ah, qué alegría para los que confían en el Señor, los que no confían en los orgullosos ni en aquellos que rinden culto a ídolos.

El Salmo 40:4 es un versículo que resuena profundamente en el corazón de muchos creyentes, ofreciendo una perspectiva sobre la bendición que representa confiar en Dios y buscar Su dirección. En este pasaje, se habla sobre la felicidad y la fortuna de aquellos que encuentran su refugio en el Señor.